Abundan en nuestro peculiar calendario, catálogos de días de los más variopintos, abarcando en su
señalamiento, tanto personas como objetos o situaciones, todos con el mismo fin de
difundir una lucha o una queja o simplemente buscando dejarse notar, también
haberlos haylos , muchos que se unen al carro con fines comerciales o propagandísticos,
y aunque no es mi fin, el cortar esta escalada de información que
seguro a muchos ayuda y si no, por lo
menos consigue hacerse notar, sí que lo es, la de peticionar o la de
la rogar , a que al unísono pidamos que nos pongan el nuestro, al que este gremio de seres que yo íntegro y que deambulamos
por este nuestro planeta, que tomamos
prestado a renta indefinida y del que ya muchos consideran propiedad.
Y me refiero a este gremio,
como los integrantes que andamos desengañados, desilusionados, desencantados,
frustrados, escarmentados, desconfiados… de
estos nuestros líderes de paja, que se creen pastores de rebaño y que como
tales nos intentan tratar, desestimando y desoyendo nuestras quejas diarias,
fomentadas en su mayoría por la inoperancia de este sector que se unen a la mística
del olimpo de los dioses, una vez que juran sus cargos.
Quedándonos a veces
solo la opción del pataleo o en lo mejor de los casos hacerse oír atreves del ciberespacio,
que a muchos nos sirve como desahogo.
Reiterando que no es
mi oportunismo, ante recientes días de reclamo, a los que yo me uno sin duda, y de los que días
atrás en números espacios se hizo eco de esta lucha por defensa de números derechos
que son pisoteados al antojo por energúmenos que dicen integrarse en la raza de la que
tanto nos habló Darwin, sino la de evocar esa petición para que un día
cualquiera, que es no necesario sea
señalado, ni festivo, ni puntero, en este nuestro calendario, nos otorguen la opción
de poder sentirnos integrados, y aunque de poco servirá, pues el rodillo de
estos semidioses intocables seguirá su camino, si por lo menos nos dará un ápice
de confianza al mirar a nuestro alrededor y no vernos solo.
Por eso peticiono en
mi modesto blog que si alguien tiene el don y el poder de otorgar dicho privilegio
, que se acuerde de catalogarlo como el DIA DEL DESENGAÑO, y verán como adeptos
no le falta…. Ahh y si ya esta petición ya fuese hecha con anterioridad y fue concedida, aceptaría con grato placer me
informaran de tan peculiar fecha… Saludos y cuídense ahí fuera…
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarCreo que seríamos muchos, estoy de acuerdo.
ResponderEliminarMuy buena reflexion. Tambien estoy de acuerdo. Un placer pasearme neuva vez por tu espacio, he pasado un rato ameno. Vuelvo pronto!!
ResponderEliminarSawabona!